Mitchele Vidal | @imagenesurbanas

sábado, 6 de octubre de 2012

Lo que nos deja el gobierno de HRCHF

Faltan horas. Apenas horas para que los venezolanos decidamos entre seguir  anclados -no en el siglo XX, sino en el XIX -gracias al discurso trasnochado y al proceder excluyente del actual gobierno, o votar porque el progreso nos abra las puertas del siglo XXI; 12 años después de lo que indican los calendarios.

Así las cosas y con mis esperanzas puestas en el cambio, me dispongo a resumir las obras públicas que se realizaron en este eterno período que vale casi por tres de los anteriores. La mayoría de ellas están inconclusas... Es decir, 14 años y millones de dólares no bastaron para terminarlas.

Aquí vamos.

Gran "Misión" vivienda
Apenas iniciada en 2011 el gobierno nacional emprende este plan forzado por la gran cantidad de damnificados que dejaron las lluvias de 2010 y 2011. En este país tropical, las lluvias torrenciales siempre son "una sorpresa". Pero la peor tragedia no es su extemporaneidad sino su concepto. Para el gobierno nacional y peor aún, para los profesionales que llevan a cabo esta misión, hacer ciudad es hacer vivienda. Sin plan estratégico, sin diseño urbano. Sencillamente la gran misión vivienda identificó una serie de lotes vacíos -estacionamientos, áreas verdes descuidadas, terrenos baldíos- y allí implantaron edificios. Sin estacionamiento, sin equipamiento, sin concierto alguno con su entorno y además, invadiendo las pocas aceras de los caraqueños para depositar todo el material de obra. Esto último ya lo denunciamos aquí. Son edificios ubicados en zonas con altísimo valor de mercado cuyos apartamentos serán "adjudicados" a familias sin hogar, no se sabe bien con qué criterio. Es decir, el gobierno se hipoteca, porque estos edificios tendrán que ser mantenidos por el gobierno. Cero sustentabilidad.

Los autores de los proyectos son desconocidos. El gran artífice es el gobierno nacional a través de la Oficina de planes y proyectos especiales de la presidencia de la República. Así, desde hace meses, los caraqueños hemos visto emerger edificios cuyas vallas promocionales no hacen alusión alguna a los profesionales responsables de tales desatinos sino al gran "benefactor" de la misión. 

Hoy, finalmente vi los proyectos en la exposición del Musarq, Museo de Arquitectura y muchos de ellos provienen de oficinas chinas, iraníes, bielorusas, rusas, españolas y portuguesas. O sea, cientos de arquitectos venezolanos están sin trabajo o ejerciendo otras labores y el gobierno contrata oficinas extranjeras para hacer nuestras viviendas. ¿Cuántos estudios, anteproyectos, proyectos incluso, duermen el sueño eterno en nuestras universidades e instituciones nacionales dedicadas durante años a estudiar este tema? ¿Cuántos profesionales -como Josefina Baldó y Federico Vilanueva- por citar sólo dos, que han dedicado su vida a estudiar el tema de la vivienda fueron consultados para este plan?

No entraré en detalles de los proyectos pero sí comento que los mejores,  en lo referente a estudios de fachadas y selección de cerramientos son los criollos (los emanados de OPPEPR). Algunos de ellos tiene lúdicos estudios de fachada que recuerdan nuestra herencia de los maestros del cinetismo. 

Pero lamentablemente, estos no son los que están construidos. Los chinos, bielorusos y rusos -obviamente- demuestran su total desconocimiento de nuestras condiciones climáticas pero ¿y sus asesores? ¿no eran, al menos los asesores, venezolanos? La prueba más fehaciente de esta carencia es la  orientación de los edificios; en muchos casos la misma pieza es "colocada" norte-sur y en otros este-oeste. Ya sabemos los caraqueños lo que siginifica una ventana, sin protección, hacia el oeste franco. También sabemos el pecado de tener una fachada norte ciega; negando nuestro Ávila. Hay otro elemento que llama la atención, en muchos de los proyectos se ha usado un solo tipo y tamaño de ventana; ¿cómo responde esta limitación a habitaciones de usos distintos? Se saltan determinantes elementales. 
Para verlos los invito al Musarq donde hay amplia información en planos, renders y maquetas de cada proyecto. Eso sí. Les advierto, no encontrarán planos urbanos ni pistas de cómo estas nuevas viviendas, algunas de alta densidad, se insertan en nuestras mismas calles, sin aceras y sin transporte público. Solo los desarrollos más grandes contemplan zonas deportivas y equipamiento.

Las obras están en diversas etapas constructivas. Unas pocas terminadas y habitadas; la mayoría de los edificios se eleva unos pisos, pero a todos tendremos que atenderlos con un equipo interdisciplinario que emprenda la difícil tarea de terminarlos y dotarlos de servicios adecuados e insertar a sus habitantes en programas sociales y lo más grave, solventar el mencionado tema del mantenimiento y la conformación de entes que los administren.

Museo de Arquitectura 
Ya lo dijo Federico Vegas, la mejor sede para el Museo de Arquitectura era la anunciada cuando se inició el proyecto; la antigua sede de la Galería de Arte Nacional. Esta fue mudada, con todas sus colecciones, al edificio de Carlos Gómez De Llarena, concluido en 2010. Pero el profesor Juan Pedro Posani, director del Musarq, decidió cobrar y darse el vuelto, así que diseñó la sede y ésta fue construida sin que mediara licitación alguna, como corresponde a una obra pública.
El Musarq se yergue sobre la avenida Bolívar e impone su tosca volumetría sobre el Nuevo Circo. Una obra de Alejandro Chataing y Luis Muñoz Tébar, inaugurado en 1919, que dejó de ser plaza de toros para albergar importantes espectáculos culturales. Para ello, contaba con una pequeña plaza, a modo de antesala, que fue borrada por el Musarq. Llevando el criollo "Quítate tú pa' ponerme yo" al mundo de la arquitectura y sus nuevos "protagonistas". 

Decepciona que Posani -mismo que trabajara alalimón con Carlos Raúl Villanueva nada menos que en nuestra Ciudad Universitaria- valide unos acabados, especialmente los del concreto en obra limpia, que en nada representan un material del que tenemos sobradas muestras de excelente factura, especialmente en la arquitectura de los años '50. En el Musarq el concreto tiene la porosa apariencia de malos encofrados y peores vaciados. 

Para más INRI el proyecto enuncia entre sus valores "la adaptación a las condiciones geográficas y ambientales, partiendo de nuestra extraordinaria y única realidad tropical", sin embargo, está cerrado...y con aire acondicionado... Allí no hay ventilación natural, ni cruzada. Solo unos balcones nos conectan visualmente con la avenida Bolívar y le da la espalda, displicente, al Nuevo Circo que languidese tras una reja.

Mausoleo del Libertador
Faraónico, inconsulto, soberbio y descontextualizado pero ya hablé mucho de él aquí.

Eje del Buen vivir
Es una obra muy pequeña de Raúl Grioni, si la comparamos con las anteriores, pero tiene su encanto. Aquí podrás leer lo que ofrece.

Bulevar de Sabana Grande 
Rescató un espacio para los peatones que había sido arrebatado por la mercadería informal. Tantos años de abandono hicieron mella pero se puede caminar sin esperar la Bohemia que fuera su sello indiscutible en los años '70 y '80. Aquí la nota publicada.

Hospital cardiológico infantil
Obra de  los arquitectos Carlos y  Lucas Pou Ruan, lamentablemente no lo conozco y no tengo mayor información. Obtuvo en 2006 el 2° lugar del premio de Arquitectura e Ingeniería hospitalaria en Buenos Aires y está en plena función.

BusCaracas
Estrenado sin terminar, como corresponde a tiempos pre electorales, aún no he tenido la dicha de conocerlo, pero de lo que sí doy fe, es de los estragos que ha ocasionado esta obra -que pretende mejorar el servicio del transporte público en Caracas- partiendo de una premisa equivocada: no planifica ni conecta los recorridos en función de la totalidad de nuestra ciudad sino de la parcialidad del único municipio de la capital de Venezuela cuyas autoridades pertenecen al partido de gobierno. Entonces los ignora. Nació con plomo en el ala y así lo  demuestran la mora en su construcción, los astronómicos costos que alcanzó y los que faltan para hacerlo operativo. 

Suscribo esta frase del diputado Stalin González en entrevista concedida a Javier Brassesco de El Universal: "Todo el tiempo y los recursos invertidos en esta creación de ingeniería civil la convierten en una de las más costosas del mundo. Más de cuatro años, cinco promesas de apertura, dos autoridades locales, tres autoridades nacionales, tres empresas ejecutoras y más de 530.000.000 de bolívares fuertes ($117.777.780) tuvieron que transcurrir para que la obra pudiera ser abierta al público, aunque aún no está totalmente culminada". Tarea pendiente.

MetroCable
A imagen y semejanza del MetroCable de Medellín, costó muchísimo más y sirve a una población mucho menor. Mi crónica publicada cerca de su puesta en servicio la puedes leer aquí.

¿Es un cohete? No, es un misil revolucionario
Aquí puedes leer cómo irrespeta la Plaza del Venezolano. Habrá que desmontarlo. 

En fin, esto es lo construido o a medio hacer. La lista de lo que no se hizo en estos largos 14 años en materia de infraestructura y mantenimiento en Caracas es muchíííííisimo más larga.  









¡Pero eso ya forma parte de la historia vieja, mañana empieza una nueva!

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